Si bien el DEET se considera seguro cuando se usa según las instrucciones, es importante tomar algunas precauciones para garantizar su uso adecuado y seguro. Aquí hay algunas precauciones a tener en cuenta al usar DEET:
Leer y seguir instrucciones: Lea atentamente las instrucciones proporcionadas por el fabricante en la etiqueta del producto. Siga los métodos de aplicación, concentraciones e intervalos de reaplicación recomendados. Los diferentes productos basados en DEET pueden tener instrucciones diferentes, por lo que es importante que se familiarice con el producto específico que está utilizando.
Evite las manos de los niños pequeños: Evite aplicar DEET directamente en las manos de los niños pequeños. Pueden frotarse los ojos, tocarse la boca o llevarse las manos a la boca, lo que podría causar irritación o ingestión del producto. En su lugar, aplique DEET a la ropa del niño, evitando el contacto con sus manos.
Evite el contacto con los ojos y la boca: El DEET no debe entrar en contacto directo con los ojos o la boca. Tenga cuidado al aplicar DEET en el rostro y use las manos para aplicarlo de manera específica, evitando el contacto con los ojos y los labios.
Evite heridas abiertas y piel irritada: el DEET puede causar irritación cuando se aplica sobre la piel rota o irritada. Evite aplicar DEET en áreas con cortes, rasguños, erupciones o quemaduras solares. Si tiene la piel rota o irritada, es mejor esperar hasta que la piel haya sanado antes de usar DEET.
Uso en áreas bien ventiladas: Cuando aplique DEET, hágalo en áreas bien ventiladas para minimizar la inhalación del producto. Si usa aerosoles, aplíquelos al aire libre o en áreas con buena circulación de aire.
Evite la ingestión: DEET está destinado únicamente para uso externo. No tragar ni ingerir el producto. Si se produce una ingestión accidental, busque atención médica de inmediato.
Almacenar adecuadamente: Guarde los productos a base de DEET fuera del alcance de los niños y las mascotas, en un lugar fresco y seco según las instrucciones del fabricante. Evite el calor extremo o la luz solar directa, ya que pueden afectar la estabilidad y eficacia del producto.
Lávese las manos después del uso: Después de aplicar DEET, lávese bien las manos con agua y jabón para minimizar la posible transferencia a los ojos, la boca o los alimentos.
Considere alternativas para personas sensibles: algunas personas pueden experimentar irritación de la piel o sensibilidad al DEET. Si tiene antecedentes de reacciones cutáneas o alergias al DEET, considere usar repelentes de insectos alternativos que contengan otros ingredientes activos como picaridina o aceite de eucalipto de limón.