El 27 de octubre de 2017, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud publicó una lista preliminar de carcinógenos como referencia, con el tetracloroetileno (percloroetileno) incluido como carcinógeno de Clase 2A. El 23 de julio de 2019, el tetracloroetileno fue catalogado como un contaminante del agua tóxico y nocivo.
Peligros para la salud
Este producto tiene efectos estimulantes y anestésicos. Los pacientes con intoxicación aguda por inhalación pueden experimentar síntomas de irritación, lagrimeo y salivación del tracto respiratorio superior. Posteriormente, pueden aparecer mareos, dolor de cabeza, náuseas, discinesia y síntomas de ebriedad. Después de la ingesta oral, pueden producirse mareos, dolor de cabeza, somnolencia, náuseas, vómitos, dolor abdominal, visión borrosa, entumecimiento de las extremidades e incluso excitación, convulsiones e incluso coma, que pueden provocar la muerte. Efectos crónicos: fatiga, mareos, náuseas, sensación de embriaguez, etc. Puede haber daño hepático. El contacto repetido con la piel puede causar dermatitis y eczema.
Peligros ambientales
La mayor parte del tetracloroetileno liberado a la atmósfera circundante se descompone debido a la luz solar, formando productos como cloruro de hidrógeno, ácido tricloroacético y dióxido de carbono. El tetracloroetileno en el agua superficial se evapora rápidamente y casi no sufre degradación en el agua. Este compuesto es estable en las aguas subterráneas, que es precisamente la razón del aumento de la incidencia de la contaminación de las aguas subterráneas provocada por vertidos industriales y acumulación de residuos.
medida preventiva
Control de ingeniería: Operación cerrada, prestar atención a la ventilación. Mecanizar y automatizar tanto como sea posible. Proporcionar duchas de seguridad y equipos para lavado de ojos.
Protección respiratoria: Al escapar del aire, se recomienda utilizar una máscara de gas tipo filtro autocebante (media máscara) y gafas de seguridad química.
Protección del cuerpo: Ropa protectora tipo gas penetrante.
Protección de las manos: Use guantes resistentes a productos químicos.
Otras protecciones: Está estrictamente prohibido fumar, comer y beber en el lugar de trabajo. Guarde la ropa contaminada con toxinas por separado y úsela como respaldo después del lavado.